Papisa Juana
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          Femenino de papa, que se aplico a la leyenda de una mujer que en el siglo IX, a la muerte de León IV, el año 855, ocupó el solio pontificio. Es la leyenda de "la papisa Juana", elegida para la sede de Roma al haber ocultado su condición femenina en su estancia en la ciudad. De tal leyenda no queda ningún dato histórico real, aunque sí la suposición de que gobernó dos años con el nombre de Juan VIII y que murió al dar a luz un hijo durante una procesión.
   Los escritores de Occidente apenas si aceptaron la leyenda, negando la mayor parte su posibilidad. Es posible que la leyenda brotara en Constantinopla hacia el siglo X, para difamar a la Sede de Roma, dado lo arduo de la rivalidad de la sede apostólica de Alejandría. Las referencias que se hacen a ella en diversos autores posteriores, están basadas en comentarios tendenciosos carentes de toda credibilidad.